El socio estratégico que tu empresa necesita.

Si consideras por un lado la cantidad de cambios en la industria, la globalización, los cambios tecnológicos y la alta competencia, y por el otro un conjunto de empresas que tienen la necesidad de mantenerse al día, te darás cuenta que con el correr del tiempo ellas pierden su capacidad de absorber internamente todos estos cambios. Esta situación, presente en todas las industrias, las obliga necesariamente a recurrir a proveedores, especialistas en áreas que no son parte de su negocio principal.

El mayor especialización de un proveedor le permite al cliente contar con un socio estratégico dentro de su equipo, quién realizará aportes en conocimiento y experiencia al momento de tomar decisiones respecto del producto o proyecto en que participa.

Es una relación en la que ambos ganan, muy distante de la tradición de reducción de costos de hace algunos años, que ha demostrado que al paso del tiempo puede generar separaciones o rupturas de relaciones comerciales entre ambas partes. En este nuevo escenario el proveedor se transforma en un socio que realiza aportes concretos al negocio.

Construir una buena relación con los proveedores toma tiempo, es un proceso en el que ambas partes logran establecer una relación de confianza, que permita avanzar en la planificación de nuevos productos, y en la que cada uno, en su propia área de especialización, planifica su capacidad y aporte, de manera que ambos ganen.

Finalmente te darás cuenta que al entregar un producto o servicio a un cliente final, se materializa el resultado de la coordinación que ha realizado la empresa con todos sus proveedores, es una cadena en la que el producto resultante cuenta con elementos y tecnologías de muchas otras empresas.